¿Comer en un Italiano? (Kelly)

Escuche sus propuestas mientras caminabamos por la ciudad, un italiano... no era precisamente mi comida favorita, pero tampoco estaba nada mal.

- Bueno mis gustos son un poco mas complicados como tu dices, si, pero tampoco me disgusta la comida italiana, obviamente, aborrezco cualquier comida francesa, y no, no tomo el te como algunos ingleses- la mire de reojo y continuamos caminando - mi comida favorita es la tailandesa pero vamos, que es dificil encontrar un tailandes de verdad, normalmente me llebo un chasco cuando entro, y es comida china con otro nombre.... - dije, mientras oteaba con la mirada buscando algun lugar bueno... entonces repare en mi telefono, lo saque y busque un callejero en el navegador, y alli, un restaurante bueno italiano.

- vale parece que tendremos suerte, cerca de la plaza de la union hay uno- le dije, y entonces tire yo de ella para llebarla hacia alla- al final comeras italiano bien y todo -

la gente nos envolvia por las calles haciendonos insiginificantes, pero en el fondo de mi, me sentia el mas grande, iba con ella a comer, y eso me gustaba, estar con ella me hacia sentirme mejor. La observe de reojo y caminamos asta llegar a la plaza, entonces lo busque con la mirada.

- mira, alli- dije señalando.

-Lo sabía,sabía que no era algo común, eres demasiado especial.

Dije mientras recordaba mi propio pensamiento.

-Creo que voy ha hacerme con un teléfono de esos.

Comenté en voz alta, aunque fue casi más una conclusión para mi misma que para él.
Al final llegamos al restaurante, que tenía una puerta de madera pintada en color verde, y unas ventanas en las que asomaban flores, con una fachada muy mediterránea.Nada que ver con el interior, que era un elegante pero acogedor salón.Enseguida tomamos asiento.Miré a mi alrededor la decoración, no estaba nada mal.Pero enseguida interrumpió mis observaciones uno de los camareros.

-¿Tomarán vino los señores?

Abrí la carta de vinos.

-Un Brancaia Il Blue...y agua porfavor.

Dije después de analizar la carta.

-Excelente elección.

Dijo el camarero totalmente convencido de que hubiera pedido uno de los mejores, esbozando una pequeña sonrisa de simpatía mientras me miraba,después se marchó.De una cosa que si entendía era en los vinos, tantas noches cenando en sitios caros me habían proporcionado información adicional sobre que vino pedir y cual no.

-Parece que estamos destinados a encontrarnos ¿Eh?

Dije sonriendo mientras me colocaba la servilleta sobre mis rodillas

Entre junto a ella en el local, sentandonos en uno de los sitios a los que nos llebo el camarero, una mesa en el fondo para dos, despues, cuando pregunto que si tomabamos vino fui a abrir la boca para elegir un Chianti, ideal para acompañar las pastas, afrutado y suave, pero con personalidad, pero ella pidio algo que tampoco estaba nada mal.

- vaya, veo que por lo menos el gusto lo tienes fino, no esta mal....- sonrei, esperando a que le camarero lo trajese.

- si, el destino nos une en nuestros caminos, es una curiosa forma de que dos personas se conozcan, si no pasasen estas cosas, que aburrido seria el mundo, no crees?- le dije, dedicandole una sonrisa.

El restaurante tenia un pequeño problema, no permitia la entrada a fumadores asi que tendria que esperar a acabar de comer para poder embriagarme con los humos del tabaco, despues de seguramente, tan gustosa comida.

Pronto llego el camarero con el vino perfectamente sellado, abriendolo delante de nosotros, verificando asi, que desgustariamos el vino recien abierto, Cuando lo hizo, le pedi que no nos sirviera, pues el vino tenia que airearse levemente en la botella antes de ser servido.

- ¿que van a tomar? - pregunto el camarero, esperando una respuesta.

- Ravioles de espinaca y ricotta perfumadas con salvia y mantequilla- dije, señalando en la carta lo que era, porque mi pronunciacion italiana era algo pesima, luego, espere a ver lo que queria ella.

-Si, bueno...no me estoy quejando ¿Eh?

Enseguida vino el camarero,él pidió su plato y yo pedí el mio aunque me decanté por no probar mucho experimento.

-Taggiatelle a la carbonara al toque de queso.

Decidí finalmente.
Cerré la carta y se la entregué al camarero, después moví levemente y saboreé la copa de vino.Ya que no hacía falta la cata, ya conocía ese sabor, que tanto me recordaba a las cenas con mis padres y mi hermano.

-Bueno...¿que te llevó al Palacio?

Pregunté intentando abrir conversación.

Servi el vino al poco de que el camarero se marchara, el olor que desprendia era bueno, seguramente, el sabor, por el color que tenia, tambien seria bastante bueno de sabor.

- vaya, veo que tampoco te mojas mucho con la comida- jaja, bromee al ver que pedia lo que en mi casa se llama espaguetis anchos con queso y bacon.

- pues ya te digo, que buscaba un poco de tranquilidad y paz, la ciudad esta bien, pero tampoco me apasiona pasar mucho tiempo en ella, me siento encerrado- dije un poco mas serio.

- ahora entiendo aquello que me dijiste que a ver si te encontraba algo de lo tuyo, no sabia que eras modelo, no me lo dijiste... - le mire a los ojos cuando le hablaba, luego aparte la mirada y murmure por lo bajo - y con semejante fotografo tambien pediria que me buscasen algo...- me mese la perilla y acerque el vino a mis labios, umedeciendolos levemente en el vino, saboree el gusto, y luego peque un pequeño sorbo.

- no esta mal, aunque no es el mas acertado para la pasta- le dije guiñandole un ojo.

-En el fondo es un buen tipo...aunque a veces me saca de mis casillas...-rodé mis ojos y bebí de nuevo de la copa-Así que... no es este el vino adecuado....¿Y qué vino le pondrías?La verdad es que no entiendo mucho de combinar-me encogí de hombros-bueno ...quiero decir vinos, combinar ropa por ejemplo no se me da tan mal-comenté mientras me miraba lo que llevaba puesto,miré a Lank con dulzura mientras con cuidado acariciaba su mano que ahora apoyaba nerviosa sobre la mesa, seguramente debido a que en ese momento le apetecía fumar uno de sus cigarros.

Miré en el fondo de su copa mientras me perdía en mis pensamientos sin saber porque recordando todas las veces que nos habíamos encontrado,¿Qué le ocurría a mi cabeza?Me estaba volviendo completamente loca.

-Me estaba acordando de la noche del museo...-dije mientras meneaba la cabeza riendo.

- un Chianti, es el vino que se bebe en Italia con las comidas de carne en salsa y pasta- le dije sonriendo, la comida no la conocia tan bien, pero vamos, que el que bebe vino todos los dias, tiene que saber estas cositas de la vida.

- si, ya he visto estos dias, que de convinar ropa por lo menos bien- dije en tono bromista al decir por lo menos, luego servi un poco mas de vino, aveces la situacion parecia un poco mas incomoda de lo que deveria ser, me gustaria saber lo que se le pasa por la cabeza a veces, se le pone esa carita...

Me quede mirandola un segundo sonriendo, mesandome la barbilla y luego volvi a beber vino.

- El otro dia en el museo... fue una noche intensa ¿verdad?- dije mirandola un poco mas serio, pero con tono jovial- acabamos rendidos en tu casa, no se ni como tubiste fuerzas de preparar algo de comida.

-¡Oye!¿Cómo que por lo menos?-le dí un toque en el hombro, no muy fuerte, y luego le miré con cara de enfado, o intentándolo, ya que no pude evitar sonreir después.Me quedé escuchando lo que decía sobre el museo.

-Si...muy intensa.Pero la verdad...hacía tiempo que no me divertía así-No sabía tampoco bien que decir tampoco quería cagarla tratando algunos de los puntos de la noche, y del día siguiente.-Bueno, cuando el hambre aprieta, ya sabes, no hay tiempo para el cansancio; además con todo lo que habíamos bebido si me hubiera metido en la cama directamente todo habría empezado a dar vueltas y vueltas sin parar.-Dije mientras movía el dedo haciéndo círculos y señalando al cielo.

-¿Qué has estado haciendo?¿Has encontrado algo interesante en Bucarest?-Pregunté con curiosidad, esperaba que le hubieran ido bien las cosas