Reencuentro..¿accidentado?(Elizabeth Lyonel y Lyan Haley)

Sali a dar un paseo por el bosque, aunque era peligroso ir sola tal y como estaban las cosas no le daba importancia, si me cruzaba con algun cazalicantropos pelearia por mi vida, era buena en las peleas.
Me interne en el bosque y empece a correr con tranquilidad, saltando las rocas con gracilidad y flexibilidad, notaba como mi lado salvaje se iba desenvolviendo entre los arboles del bosque, notaba en mis ojos la mirada salvaje, corri mas rapido, pisando con fuerza y dando grandes zancadas.
En un momento subi sobre una roca y con la misma gracilidad que salte sobre ella volvi a saltar, dejando que mi instinto saliera. Con una azulada luz, mi cuerpo humano se transformo en el de una loba de pelambrera blanco perla.
Mis patas resonaron con un golpe seco cuando posaron sobre el suelo y segui corriendo, sintiendo la adrenalina por mis venas y descargando mi energia; en un momento, capte un olor que fue como un cubo de agua fria sobre mi cabeza, lo que hizo que mis zarpas se clavaran en la tierra y derrapara por asi decirlo.

"Mi olfato me esta engañando seguro" pense aun sobrecogida.

Hacia años que no recordaba el olor de ella, mi mejor amiga, despues de tantos años, se marcho poco despues de que yo me transformara junto a mi hermano en loba y nos incorporaramos a la manada; aquello me entristecio, Beth me caia muy bien. Esperanzada segui su rastro, olfateando el suelo y caminando con lentitud para asegurarme de que lo seguia bien.
Mientras seguia su rastro pense ¿Que hacia ella en Rumania?¿Que hacia ella en medio del bosque? Un lado mio, el del instinto me decia que me marchase, pero mi corazon me decia lo contrario ¿Y si estaba herida? tendria que ayudarla. Su rastro me llevo hasta un camino algo despejado, usado frecuentemente por otros lobos, pero ahi perdia su rastro; mi mirada ambarina inspecciono los arboles confusa ¿Como podia desaparecer su olor asi de repente? habia algo raro..

Me habian mandado al bosque en una expedición para matar a los Licantropos que hubieran por aquella zona, ya que se habian dado indicios. Tendria que matar a cualquiera que me encontraba y eso seme daba bien, no tenia ni una compación con ningunos de ellos por ser los culpables de matar a mi madre.
Y allí estaba yo en el bosque con mi arma guardada en la cartuchera, con mi ropa de caza.
Entonces recorde como me habiaenseñado mi madre a cazarlos y lo que era antes de que todo este nuevo mundo formara parte de mi, recorde a Cass y a mi amor secreto... Lyan. Mi madre me separó de ellos, pero se lo perdoné y ahora me encontraba alli intentando matar a los Licantropos.
- Si ahora me viera Cass...- Dije con un suspiro.
Sabia que le encantaban los animales.
Oí un ruido y rapidamente me escondi entre los arbustos, apareció una loba de colos blanco perla, ya sabia por mucha experencia que era una licantropa. La loba no se dio cuenta d donde yo estaba y eso era una gran ventaja. Yo no dude en sacar mi arma ( pistola) y dispararle. Viendo como se retorcia de dolor me acerqué a su cuerpo que yacia sobre el suelo. Esperé a que volviera a su cuerpo humano para poder ver su cara de dolor.

Oi un disparo, gire la cabeza pero fue demasiado tarde para moverme, senti como una bala entraba en mi costado. Solte un aullido de sorpresa y dolor y cai al suelo; intente levantarme tambaleante, pero la plata empezo a recorrer mis venas con rapidez y el cuerpo me temblaba.
Quede en el suelo respirando jadeante, oi como unos pasos se acercaban, no alce la vista pero eche las orejas hacia atras y solte un pequeño gruñido, seguido de un quejido. Note como mi cuerpo cambiaba incontroladamente a mi forma humana, una reaccion instintiva por la plata; el frio empezo a hacerse notar cuando mi pelaje ahora ensangrentado se convirtio en la delicada piel humana.
Tenia los ojos cerrados pero tiritaba de frio, no solo por el frio en si, si no por que sentia mas debil. Alce mi mirada, aun de color ambarina hacia la persona que me habia echo aquello, mi corazon se encogio al reconocer ese rostro, no podia creer lo que veia; era Elizabeth.
Ella, mi mejor amiga me habia disparado, me iba a matar, ¿como habia acabo siendo una cazadora? era como estar en una pesadilla, en la que finalmente yo perdia la vida a causa de la plata. La mire fijamente, notando como mi cuerpo temblaba.

- Beth...no...no me mates...- le suplique con voz temblorosa

Estaba a su lado y al escuchar su gruñido me senti mejor, otra nueva mejora en un mundo complicado. Un licantropo muerto para el bienestar social. Esperé a que su cuerpo cambiara. Empezó a temblar y era por la plata que recoria su venas poreste instante.
- Por vuestra culpa murio mi madre y ahora yo me vengo por su perdida.- Dije antes que se transformara.
Vi su cuerpo desnudo y preparé mi arma de nuevo, pero cuando observe su cara me quedé de piedra.
Era Cass...
Como era ella una Licantropa, como podia ser...
Escuché su voz.
- Tran.. quila no te mataré- Pero que tonteria estaba haciendo... ellos habian matado a mi madre y ahora tenian que morir, pero no podia matarla a ella, mi amiga, mi "hermana" la que me escuchaba cuando estaba enfadada la que se reia de mis tonterias.
Me agaché a su lado y le cogi entre mis manos su cabeza.
- Cass lo siento perdoname.- Dije quitandome la chaqueta y poniendosela por ensima.

Dijo algo sobre su madre ¿Su madre tambien fue una cazalicantropas? en ese momento una pieza de un puzzle en mi cabeza, ella se habia ido poco tiempo despues de que mi hermano y yo nos convirtieramos, aquella tarde al salir del instituto vi a la madre comportarse de forma rara, esa misma tarde Beth me dijo que se marchaba; su madre habia descubierto que mi familia no era como todas.
Vi como la expresion de su rostro cambio al verme en mi forma humana, me dijo que no me mataria, pero ya no sabia que creerme, mi mejor amiga, con la que habia compartido mis miedos y secretos me habia disparado, y aunque no me matase ahora, ya lo estaba haciendo la plata por mis venas. Oi su disculpa y me puso su chaqueta por encima, clave mi mirada ambarina en la suya azulada.

- Ve...vete... como llegen lobos... te mataran...- murmure- ya.. me las a..abiare como pueda...-

No debia ayudarla a huir, pero aunque fuese una cazalicantropa y me hubiese disparado era mi amiga y podia ver en sus ojos el arrepentimiento de haberme disparado. Trage saliva, intentando mantenerme despierta, no podia dejarme vencer, tenia que vivir, por mi hermano, no podia dejarle solo y expuesto al mundo.

Negé con la cabeza, no era tan sadica como para dejar a mi mejor amiga muriendose por mi culpa ni hablar.
- Me da igual que me maten yo me quedo aqui contigo, porque fue culpa mia, ¿Cass sientes la plata?- Pregunte con miedo-Hay que sacar la bala ahora mismo.- Observé su cuerpo y busqué la herida en el. Estaba justo entre las costillas y los riñones.- Has tenido suerte de que hoy no tubiera punteria.-
Le apreté con mi mano en la heridapara parar la hemoragia, pues no sabia como sacar la bala. Nunca habia tenido que curar una herida de bala de plataa unlicantropo porque nunca me habia sentido ningun sentimiento de pena hacia ellos.
- Cass como sacamos la bala.... Llama a alguien por favor...- Dije muy asustada, no queria perderla ahora que la habia encontrado.
- Cass no te preocupes por mi, pero llama a alguien ya-

Bien, vamos por partes.

-Uno, el mínimo de líneas por post, Elizabeth, es de OCHO. No lo has incumplido solo una vez, si no varias. Tenlo en cuenta para la próxima.

-Dos, tu avatar, Elizabeth, es demasiado grande. El tamaño máximo permitido es de 100x100. Cámbialo a ese tamaño o estaremos obligados a borrártelo. En caso de que no sepas consulta con algún firmero de la galería y que te lo haga él.

-Tres... La plata es SUMAMENTE TÓXICA para los lobos. Mucho más cuando entra en forma de bala, colándose ya de por sí en el organismo. El veneno se extiende con rapidez, y no es coherente que Cassandra siga hablando con normalidad o actúando como si fuese una herida normal, cuando debería estar agonizando y empezando a sufrir parálisis, obligándola, sí o sí, a salir de esa escenaen busca del antígeno. Y por otra parte, Elizabeth, eres una cazadora de la esvástica de plata. Las amistades o los sentimientos de culpa y arrepentimiento no van con ellos, los dejaron atrás. No puedes haberla disparado y después echarte a llorar por haberlo hecho. Son intransigentes, están por encima deello y por lo tanto resulta incoherente.

Dicho esto vamos a proceder a cerraros este rol. Se ha ido avisando ya a ciertos usuarios de comportamientos inadecuados, y esperamos que comprendais que a veces hay que dar un ejemplo para que las cosas vuelvan a su cauce. A la próxima cumplid con todo lo dicho y no habrá ningún problema.

Un saludo.