¿Desde cuando no piso este lugar? *Libre*

No tenía ni idea del tiempo en que había pasado para no pisar este lugar. Después de dar el "estrellazo" apenas tenía tiempo para ir a otro lugar. Pero siempre sacaba tiempo para hacer otras cosas solo que no se me había ocurrido pasar por aquí, hasta ahora. Podría decirse que he hechado de menos esto pero aquí estaba.

Tenía puesto un abrigo pero debajo de aquel abrigo estaba vestida con una blusa de color blanca y una falda negra con unos leggins del mismo color, para cubrir mis pies me puse unas botas. Llevaba un pequeño collar en mi cuello. Las uñas la tenía pintada de color negro y en cada muñeca tenía unas pulseras ademas de que tenía un anillo en mi mano izquierda en mi dedo indice. Mi pelo largo liso y un poco maquillada.

Entre al lugar caminando como siempre solia hacer. Con un pequeño estilo y movimiento de cadera pero sin llegar a exagerar. Mi cuerpo estaba totalmente recto, mi cabeza alta y mi mirada al frente. Mi cuerpo estaba totalmente relajado, no tenía ninguna tensión como para que aquel movimiento fuera malo. Nada más entral al lugar la música invadio mis oidos, estaba bien la musica, por lo que dibuje una pequeña sonrisa en mis labios, me quite mi abrigo y lo di para que me lo guardaran después de hacer una corta fila. Tras hacer eso volvi a caminar para meterme más al local y me quede parada unos segundos para mirar a todas partes y ver si reconocía a alguien, aquel movimiento fue algo leve, y algo lento, tampoco es que tenía prisa por reconocer algunas de aquellas caras.

Off: permiso!

Aquella noche estaba sentado en una de las mesas del fondo del local, a un nivel un poco mas alto que la pista de baile, era una zona mas tranquila, llegaba la música, pero era un lugar donde sentarse a poder hablar. Yo estaba solo en aquel sillón de cuero junto a la mesa, pocos eran los que alrededor estaban pues preferían estar cerca de la barra y la pista de baile.

Di una calada al cigarro recién encendido observando la copa sin tocar de sobre la mesa. Mis ojos paseaban por las criaturas que allí "revoloteaban" al son de la música ¿Qué hacía yo en el Luna pudiendo estar buscando a Jeremmy como había estado haciendo durante el día? La respuesta era sencilla, necesitaba descansar aunque fuera un rato, y no iba a dormir para que las pesadillas de nuevo acudieran a mi cabeza, ya era suficiente con la que estaba viviendo.

Expulsé el humo lentamente por el perfil de los labios, tenía activa la mascara de pasividad, pero un leve gruñir de mi estomago me hizo fruncir levemente el ceño. Desde que Jers desapareció no comía bien, la mano libre reposó durante unos instantes sobre la zona del estomago, mientras que mis ojos se desviaban a la copa que sobre la mesa descansaba, alargando luego el brazo para alcanzarla y darle un sorbo, en pos de calmar de manera castigadora el hambre, contrarrestandolo con vodka.

Tras hechar una ojeada al lugar, empece a andar de nuevo hasta llegar a la barra donde pedi un Martini para empezar la noche. Sí había durado un pequeño tiempo sin venir a este lugar pero tampoco tanto. O bueno quizas si. En fin que ahora esta noche estaba en el lugar. Lastima era no ver a nadie que reconocia pero en parte me alegra que nadie reconociera a esta pequeña cantante.

Me dieron mi martini pero no espere mucho tiempo ya que conocia de vista al camarero y habíamos intercambiado algunas que otras palabras. El lugar no había cambiado para nada y hoy tenía buen humor. Ademas de que la otra semana me la pase fuera de casa con unos pequeños amigos que me convencieron para salir. Había dormido bien así que mi cara no se expresaba una cara de sueño. Bebi un pequeño trago de la bebida pero yo no era muhco de estar cerca de una barra. Así que cogi mi copa tras pagarla y empece a caminar por el local en busca de alguna mesa libre.

Sonreí cuando divise una, era una sonrisa divertida y traviesa. Camine con el mismo andar de siempre moviendo mis caderas para un lado y para el otro. Aquella mesa no estaba precisamente libre, había un gran hombre sentado en ella y que lo conocia perfectamente. Aquel hombre o mejor dicho aquel lobito o lobo feroz era Gabriel el jefe de todos nosotros, ed decir de los lobos y dueño de este lugar.

Sin decir nada me sente en la silla cruzando mis piernas mientras dejaba mi bebida en la mesa. Hacia un par de día que no le veía.
-¿Puedo sertarme ? -Pregunté ya sentada en la silla con uan leve sonrisa que desaparecio al fijarme bien en su rostro. No tenía buena cara o eso me parecia a mi. - ¿Te encuentras bien? -Pregunte después-


OFF: Ella no sabe que buscas a tu hijo oki?

Mis labios sujetaron por un momento el cigarro para poder darle una calada fijando los ojos en un lado. Me sentía mal por estar en el Luna sin hacer nada y Jers a saber donde, aunque a lo mejor estaba ahora mas feliz que cuando nos cruzábamos de manera casi violenta. Suspiré expulsando el humo de los pulmones, alargando de nuevo el brazo para coge el vaso y darle otro sorbo.

Mientras seguía en mis pensamientos, un olor cercano llamó medianamente mi atención, lo justo para alzar la mirada hacia...¿Aitana? Si creo que así se llamaba -El local es mio pero no impido que alguien se siente en mi mesa- Respondí a su acomodamiento en el otro sillón. Preguntó que si me encontraba bien y tardé unos segundos en responder, asintiendo con la cabeza -Si, tan solo algo disgustado por el tamaño de los hielos...- Mentí moviendo el vaso con aquellos cubitos de hielos ahora pequeños habiendo aguado el vodka sólo.

Mis ojos ambarinos tan característicos, que tan poco se diferenciaban a los de la bestia de mi interior si no fuese por aquellos tonos marrones que "ocultan" el amarillo, se posaron en los de ella -¿Buscando un rato de diversión?- Preguntando para luego dar otra alada al cigarro aun mirándola.

Desde que he empezado a cantar deje de lado lo de fumar y para tener una mejor voz me convenci de hacerlo pero sufria muchas tentaciones al oler el humo del tabaco. Pero no iba decir nada ya que había sido yo la que se acerco hasta él y se sento en la mesa. Con la respuesta que me había dado tan solo tome mi bebida y me la lleve a la boca para luego regalarle una pequeña sonrisa. Poco después contesto a mi pregunta que tardo un poco en contestar. Observando al mismo tiempo aquel vaso que tenía él. Ya estaba aguado y había mas agua que otra cosa.

Aquello pequeños segundos me hicieron pensar que no era ese disgusto que tenía además de que disguntarse por lo que había dicho. -Si. tú lo dices...-Murmure mostrando una pequeña expresión en mi cara de que aquella respuesta no me convencia. Luego le mire cuando pregunto aquello. Viendo como aquel humo salia de su boca. No pude evitar arrugar un poco la nariz.

-Digamos que sí. Pero es más porque extrañaba estar un rato en este lugar. -Mire hacia un lado.- Que por cierto, deberías darle mas marcha al lugar si no quieres que se te vaya la clientela. -Dije aquello con un tono burlón con media sonrisa ladeada. Él me ahbaía ayudado a cantar pero de eso ya hace tiempo aun así se lo agradecia por hecharme un cable.- Se que hace mucho no te veía la cara. -Dije pensativa- Pero se escuchar. -Comente después, no sabía si estaba en lo correcto pero de todas formas se lo decia. Aquello era una de las cosas que se me daban bien, aunque sea muy cabezota , si se podrái decir de esa manera.-

Escuché sus palabras sosteniendo su mirada cuando después de echar aquel vistazo me miró. Lentamente expulsé el humo por la nariz -He contratado algún que otro grupo para el espectáculo en directo, ya sabes, a lo mejor alguno acaba acompañándote en ese mundo de humanos en el que te nuevos- Estiré la mano para dejar el vaso de vodka aguado sobre la mesa, ya pediría otro cuando tuviera ganas y recuperara fuerzas para levantarme.

Añadió un "se escuchar" lo cual no provocó ningún cambio en mi expresión. La miré en silencio, a estas alturas todos los de la manada sabían de la desaparición de Jeremmy y supongo que una mas no iba a cambia nada, podría incluso ayudar a buscar o simplemente prestar atención por donde caminase por si ve escucha o huele algo con referencia a Jers. Tras aquel ahora si largo y notable silencio hablé -Jeremmy ha desaparecido- Tras aquellas tres palabras que me pincharon en el pecho, di una calada al cigarro como si aquello no fuera conmigo. Pero la realidad era otra, la realidad era que no comía buscándole por el día y no dormía buscándole por la noche, no había lugar para el sueño, mi descanso era aquel rato sentado en aquellos sillones de cuero en aquel lugar apartado del jaleo de los bailes de la gente. Mi rostro no cambió en ningún momento, no quería cambiarlo, tenía que mantener aquella fachada que todos creían impasible hacia mi propio hijo y demostrar que mi preferencia era la manada... mentiras que yo mismo me había creído hasta hace poco.

Siempre he estado mezclandome con las dos razas pero no todos los humanos eran "malos" hacian cosas buenas e inventaban muchas cosas aunque muchas de ellas no se necesitaba para poder sobrevivir al fin y al cabo son o somos algo materialistas. Pero me gusta cantar y lo hago con mucha fuerza sin importarme quienes escuchen mi canción, es más me gustaría que no solo en este lugar se me escuchara. Pero era lo que había por le momento.

-Y si no te sirven podrías contratarme para el mejor show de rock. -Comente como si nada, no me importaría cantar en este lugar. Es más me gustaría poder hacerlo. -

Después de hacerle aquella pregunta hubo un silencio que no lo rompi. No era de las que rompian el silencio cuando lo había ademas aquel silencio me confirmo que había algo más, pero su expresión no cambio. Era un hombre realmente curioso, su forma de ser aunque tal vez sea una coraza que impone por el papel que desempeña. Un tipo duro. Una roca.

Pero cuando dijo aquello como si nada, la desaparición de su hijo, no habái tenido mucha relación con su hijo pero le había visto un par de veces. Ladee un poco la cabeza arrugando la frente sin creermelo. -¿Como que ha desaparecido? -Pregunté hechandome un poco hacia dleante con mis manos puestas en la mesa. No entendia como pudo haber desaparecido. Es decir, debio de pasar algo para que desapareciera. o el se marcho por sus propias patas o no... Podía imaginarme todo tipo de cosas tras aquella palabras. Eso me pasa por estar muy lejos de mi...gente... no enterarme de las cosas que pasan. Supongo que es hora que me pusiera al día. -¿Hace cuanto ha desaparecido? -Pregunté al cabo de unos segundos y mirando el contenido de mi vaso -

Expulsé el humo de una nueva calada para luego halar -No creas que deshecho esa idea- Dije con respecto a lo de contratarla -Aunque solo sea por una vez, ya tienes tu fama así que anunciar un concierto tuyo aquí me daría mas clientes a mi- Hablaba como si nada, como si lo de Jeremmy no me afectara y ese es el semblante que quería dar y que a pesar del cansancio podía actuar.

Estiré la mano para sacudir el cigarro en el cenicero -Casi dos semanas- Respondí al tiempo desaparecido -Y bueno desaparecido o fugado...se ha ido y no sabemos donde- Continué hablando de manera fría casi. Yo mismo me sorprendía en aquel momento de como estaba hablando, cuando momentos antes me sentía por el suelo presionado derrumbado, mas bien derrotado. -Estamos buscándole- Di otra calada al cigarro, a ojos de los demás parecería que yo no movía un solo dedo y que mandaba a otros a buscar a Jeremmy, pero lo cierto era que yo recorría en soledad las calles buscándole por mi cuenta preguntando a otros e incluso preguntando a algunos humanos, humanos con los que nunca quería tener contacto, eran "victimas" de mis descripciones y muestras de fotos, aunque aquellas fotos eran de Jeremmy con unos 6 o 7 años, siempre las llevaba en la cartera deseando quizás que aquella época regresase.

Me lleve un mechon de pelo detras de mi oreja. La bebida aun no había vuelto a beberla tras lo que comento. Pero, lo que no sabía era si en verdad le importaba que Jeremmy su hijo, su unico hijo estuviera desaparecido. Bueno, no parecia tener buena cara pero aun así llegaba a confundir. -Así es. -Respondí brevemente a lo del concierto. Sin duda alguna eso podría aumentar la clientela.

Dos semanas, estaba desaparecido por lo que contaba. -No le buscan lo sufiente como para querer encontrarlo. -No puede evitar decir. Es que no entendía como podía desaparecer sin dejar ni un rastro. o es que simplemente el no quiere encontrarle. No lo sabía pero me trague ese comentario puesto que tenía que tener un respecto hacia él. Cerre los ojos unos segundos para clavarlos en el después.- Podras contar conmigo en su busqueda. -Preferí decir esto que lo otro, situaciones como estas no sabia como actuar. Aunque eso me hizo pensar en el abandono que había sufrido a lo largo de mi vida. Me encerre en eso hasta poder construir un gran muro que solo aquellos que merecían pasar por el otro lado pasaban.-

-Aunque algo le tenía que pasar para que se fuera así sin más, si es que se fue por su propia voluntad. -Tal vez quise insinual algo pero tener la impresión que tengo de Grabiel ahora mismo no es precisamente la de un padre muy preocupado por le bienestar de su hijo pero yo no soy quien para juzgar.

Di una ultima calada al cigarro para luego aplastarlo contra el cristal del cenicero -Seguramente no querrá que le encontremos- Expulsé el humo hacia un lado acabando de apagar el cigarro -Y de sobra se que puedo contar con todos, bueno casi todos, descontemos a los que se empeñan en llevar la contraria y arriesgarse a acabar en las manos de los humanos cazadores- Me acomodé en el sillón regresando la mirada a ella -Supongo que se habrá cansado de no hacer nada y quiere llamar mi atención- Mi interior se encogía con mis propias palabras era como si me clavara un puñal tras otro en el estomago, pero era aquello o demostrar debilidad ante un semejante.

Mis ojos seguían en los de ella -Pero bueno hablemos de negocios, ¿Te interesa ese concierto exclusivo?- Quise cambiar de tema, no quería seguir hablando de Jeremmy o acabaría sucumbiendo a la tristeza que se apoderaba de mi cuando atravesaba el umbral de la puerta de mi casa.

Tal vez sea eso. El hecho de tener a un padre que tiene que ocuparse de una manada entera y tal vez poca atención le ha prestado a su hijo. Solo son pensamientos mios que no tenían que ser verdad.

Cuando apago el cigarrillo en el cenicero me alegre por dentro, ya no iba a tener el humo muy cerca de mi. Pero eso de arriesgarse a que seamos descubiertos no me gustaba para nada. Los humanos en cuanto se sienten amenazados siempre pasan al ataque pero ellos siempre se sienten de esa forma, no le juzgo a aun, ya que si yo fuera humana puede que haría lo mismo. Proteger a mi raza.

No dije nada más de lo de Jeremmy porque no tenía nada que decir además de que él ya había cambiado de tema por lo que respecte aquello. Yo al contrario sin dar muchas explicaciones a un tema del que no quería hablar cambiaba rápidamente de tema.

-Por supuesto.-Conteste con toda seguridad y serenidad-No tendría ningun problema con mi manager acerca de este concierto. -Agregue pero sin ninguna sonrisa para este caso, además después de lo que me conto no creo que me saliera una sonrisa aunque quisiera.-¿Para cuando sería?-Aunque la pregunta debía de ser cuanto me pagaría pero intuía que pagaría bien.- ¿Quieres que cante alguna en especial?-Pregunte para saber si tenía una preferencia entre algunas de mis canciones-

Me encogí de hombros, a su primera pregunta, había conseguido descentrar el tema de Jers del cual no tenía ánimos para hablar, aquella falta de ánimos seguía oculta tras aquella mascara siempre visible -No se para cuando te venga bien- Hablando sobre el conciertillo que se propuso -Sólo avísame con tiempo para apartar a las actuaciones que estén en esa noche y listo, el repertorio lo dejo en tus manos- Dije entrecruzando los dedos a la altura del estomago medio acomodándome mejor en el sillón mirándola.

Aquello me vendría bien, yo mismo asistiría, necesitaba al menos por una noche despejarme de todo aquello que sobre mi pesaba en estos eternos días, no puedo permitirme el hundirme a la cara de los demás, tengo que mantener un estatus con los demás lobos, si en que su líder cae...¿Qué harán? algunos se alegrarían otros se sentirían perdidos...el resto, no tengo ni idea, pero es algo que no quisiera comprobar.

La música por un momento se vio apagada, pero fue el tiempo que cambiaban de un grupo a otro, tardaban algo mas de 5 minutos en hacer el cambio, ya que la mayoría llevaban sus propios instrumentos aunque yo les ofrecía unos instrumentos básicos. No entenderé demasiado de música, pero se lo mínimo para poder facilitar a aquellos grupos lo que necesiten y la economía del local va bien para poder permitir esos gastos.

Me quede pensativa con lo que había dicho. -Hmm, bien, segun recuerdo la semana que viene estare libre. No tengo ningun concierto ni nada. Así que se podría ser algunos de esos días- Respondí a aquello. Pero supongo que eso ya se lo dire con mas certeza. Lleve mis manos al vaso de mi bebida, jugueteando con él mientras miraba aquellos pequeños movimientos.- Supongo que no habrá prisas hacer este concierto o si? -Pregunte alzando la mirada hacia Gabriel. Aunque no creo que haya prisa si fuí yo misma la que lo propose aunque también el sabra ya que es el dueño de dicho local. La música se detuvo y yo cogí el vaso entre mismos para beber el contenido y dejar solo un pequeño trago que no bebería. Volvi a mirarle, aunque era el lider de los lobos se podía ver que el ambiente estaba tenso. Debía relajarse pero con lo que le esta pasando no creo que haya forma o tal vez si?.

Baje mi pierna que la tenía encima de la otra para levantarme del asiento y caminar mientras pasaba las llemas de los dedos por la mesa, hasta llegar y ponerme detras de Gabriel. Puse ambas manos en sus hombros.

-Estáis demasiado tenso. Relájese -Esta vez dije aquellas palabras no refiriendome a "tu" sino a "usted". Podía llegar a comprender el duro trabajo que esta haciendo por todos aunque puede llegar a ser exagerado o eso me lo paresía. Mi voz sonaba calmada, lo bueno es que no tenía un mal humor pero aquí estaba. Empece hacerle presión con mis manos suavemente dandole un corto masaje en sus hombros. Tal vez me apartaría inmediato pero así aprovechaba que estaba en pie para buscar algo más de beber o llamaría a algun camarero. Aunque menudo lugar para hacerlo, pero ¿Qué más daba?

Apoyé el codo en el posa brazos del silla y apoyé la mandíbula sobre el puño cerrado mirándola, negué levemente ante la prisa -No hay prisa, pero cuanto antes mejo ¿no? Supongo que te hará cierta ilusión cantar en el primer lugar donde viste la luz- Comenté mientras la observaba, se levantó y mis orbes siguieron su movimiento sin moverse mi cabeza hasta que pasó a mi espalda, y mis hombros se tensaron al notar sus manos en ellos. Fruncí levemente el ceño ante aquel gesto, bajando el brazo en el cual se apoyaba mi cabeza quedando ahora erguido, en otra ocasión habría retirado sus manos e incluso forcejeado y echado de allí, pero estaba cansado, sin ganas de evitar que hiciera aquello, así que mantuve la postura mirando al frente.

Dijo que estaba tenso y no le quitaba razón, por eso estaba allí sentado para intentar relajarme -Gajes del oficio- Dije tan solo mostrándome impasible gracias a una de aquellas miles de mascaras que ocultaban la realidad de lo que por mi cabeza pasaba y negaba mostrar a los que a mi alrededor estaban tal como siempre. No negaba que el contacto de unas manos femeninas ayudaban en cierta manera a aquel relax

¿Hacerme ilusión? en eso no había ninguna duda. Reí por lo bajo cuando dijo aquellas palabras. Tal vez no me sorprendio tanto el que no quitara mis manos de sus hombros pero aun así lo hizo. Me sorprendi solo un poco pero, lo que estaba pasando tal vez no tenía demasiados animos hacer aquello. Que en el fondo el lo necesitaba. Un gran muro siempre esta presente donde no se puede encontrar la puerta para traspasarlo o derribarlo. Aunque algo similar me pasa a mi.

-Así es, me ilucionara cantar en este lugar. Y espero que al hacerlo las demas personas puedan disfrutar de aquel concierto. -Hable para continuar y tal vez finalizar aquel tema. El día concreto no le tenía en mente pero sería pronto. Negué suavemente la cabeza mordiendome el labio inferior al escuchar aquellas ultimas palabras. Segui con aquel mansaje en sus hombros haciendo una suave presión desde la base del cráneo hasta los hombros y luego deslizando las manos de regreso al cuello. Quería que por lo menos se relajara. No es bueno estar siempre de aquel modo.-

-Sabes, cuando quiero dejar de pensar en las cosas por unos segundos o simplemente relajarme. Lo que hago es gritar, así empiezo a desahogarme aunque si eso no me funciona me desahogo cantando. Pero para completar aquello me subo al primero autobus que pille y me voy hasta que el recorrido finalice. -Empece ha hablar siguiendo haciendo el masaje repitiendo la acción de antes.Debía decir que había otras cosas que hacia pero esas ahora no iban a servir de mucho, tampoco era de contarle todo lo que hacia en aquel estado. Pero era la primera vez que decia alguna cosa de mi, o la primera vez que le decía algo más de mi a Gabriel. Pero tal vez aquello no le funcionara pero no perdería nada en intentarlo.
Comence a ejercer una presión en forma circular con las puntas de los dedos al lado de la columna vertebral, al lado de la base del cráneo. Luego apreté cada hombro y solté cada músculo del
hombro. No era demasiada buena haciendo masaje pero esperaba que con esto se hubiera relajado.

Incline mi cabeza hacia abajo para poder susurrarle en su oreja.- Ven conmigo- Susurre despacio. Levante la cabeza para caminar y ponerme delante de él. - Venga, no esperare un no por respuesta. No creas que ese masaje era gratis. -Me cruce de brazos alzando las cejas. Lo decia enserio peor tal vez me respondiera como "no te lo he pedido" pero era cabezota y seguiria insistiendo.-

Entrecerré levemente los ojos notando aquella presión que me aliviaba la tensión de los hombros -No soy yo de hacer esas cosas...- Dije en un tono calmado gracias a aquella presión que ejercían sus manos en cada parte de mis hombros. Abrí los ojos lentamente mirando al frente llegando hasta mis fosas nasales la cercanía de su aroma, mis ojos se mantuvieron al frente escuchado sus palabras. Cuando rodeo el sillón y mis ojos pudieron verla la siguieron alzando momentáneamente una ceja. -Teniendo en cuenta que ha sido iniciativa tuya- Dije para luego apoyar las manos en los reposa brazos y luego ponerme en pie, avancé un par de pasos parándome en frente de ella -¿Y como piensas cobrar tal masaje?- Pregunté mirándola ladeando levemente la cabeza a un lado. -¿Un extra en tu pago por la actuación que harás?- No se lo que realmente pretendía, aunque estaba dispuesto a seguirla un rato el juego desde mi enmascarado lugar.

Bueno, algo similar a lo que pensaba había dicho él. Por esta cabecita podían ocurrirse miles maneras de como cobrar aquel pequeño masaje. Cuando se puso en pie a unos pasos frente a mi, deje de cruzar mis brazos. Negué con la cabeza cuando dijo lo del extra, no tenía nada que ver con aquella actuación que haría, ademas de que lo que tenía en mente era mucho mejor. Por lo menos merecia la pena intentarlo.

-Ya lo veras. Solo guíame hacia donde estan las escaleras para subir hacia la azotea. -Esta vez fuí yo quien ladeo la cabeza esperando respuesta de él. Suponía que las escaleras para subir hacia la azotea solo podía acceder él o no se quien más. Además tenía entendido que vivia aquí. Increible, me comportaba como si nunca huniera estado en este lugar. -Vamos o ¿Tendre que sacar la libreta para apuntarte en la lista de deudas ?

Tenía una sonrisa divertida en mis labios, esperando a su respuesta mientras no le quitaba la vista encima. Seguro que me mandaría a la m*erda pero me gustaría ver como lo hace.

Alcé el mentón de forma altiva, avanzando los pocos pasos que nos separaban hacia ella sin apartar la mirada de sus ojos, pasé a su lado caminando de perfil hasta rebasarla, para poder subir al tejado había dos formas, desde fuera o desde mi apartamento. Opté por lo primero, caminé para salir de la zona de las mesas, para a travesar un pequeño grupo de gente pasando por delante de las escaleras que dan a mi apartamento -al pie de esta había dos hombres pertenecientes a la seguridad del local, ambos inclinaron de manera respetuosa la cabeza al pasar frente a ellos.

La conduje al fondo del local, donde estaban los barriles de cerveza y las cámaras de frío para los refrescos, demás de las puertas a los almacenes del resto de cosas que usábamos. Una puerta de metal negra con el cartel de "salida de emergencia" estaba al final de aquel pasillo, me giré un poco para cerciorarme de que me seguía, para luego empujar la barra que abría aquella puerta que daba al callejón poco iluminado. En el exterior, los cajones vacíos de refrescos al igual que los barriles de cerveza vacíos también.

Caminé un poco alzando la mirada a la escalera de emergencia del edificio para luego mirarla a ella. Sin decir nada caminé hacia la escalera de mano que llevaba hasta la de incendios. Flexioné las piernas manteniendo la mirada fija en la escalera, estiré piernas brazo y tronco en un salto, un tanto mas alto de lo normal en un humano, llegando a coger la escaleras de mano y hacer que se extendiera. Miré por un momento a Aitana para luego comenzar a trepar esperando que me siguiera.

Empezo a caminar pasando al lado mío dejando aquel olor que tenía en ese momento. Cerre los ojos y me relami los labios para dar media vuelta y empezar a andar detras de él. Pasamos un pequeño grupo de gente. Hasta que llegamos al fondo del local. Miraba de reojo de vez en cuando lo que había a mi lado. Después traspasamos la puerta que había al final, llegando así a un callejón donde no había mucha luz. Algo normal al ser de noche. Me quede parada mirando como dio aquel salto para bajar la escalera.

Avance unos cortos pasos hasta llegar al frente de la escalera donde empece a trepar hacia arriba de tras de él.

Por dentro yo estaba emocionada pero tan solo un poco. Algo que podía también ocultar sin ningun problema. Pero era por lo que le iba a proponer y esperaba convencerlo. Seguia caminando y una vez tan solo gire mi cabeza para ver la altura en donde nos encontrabamos. Habíamos avanzado mucho y faltaba unos pocos escalones para subir arriba. Aunque claro después de hacer loq eu tenía en mente seguro que me tomara por loca si ya no me había tomado. Pero seguro que tal vez le ayudaría o por lo menos en esta noche.

Sin volver la mirada ascendí por las escaleras con paso sonoro y tranquilo, alguna que otra vez había subido a la azotea para poder observar la noche y concentrarme en saber que hace con todo lo que estaba pasando actualmente en mi lobuna vida. Ascendí tres escalones más y ya caminaba por la azotea con aquel mismo ritmo, metiendo la mano en el bolsillo para sacar el paquete de tabaco y el encendedor sacando uno de los cilindros blancos lleno de nicotina y vete tu a saber que más. le di una lenta calada mientras caminaba observando la soledad de aquel lugar, guardé encendedor y paquete en el bolsillo de nuevo.

Ascendí la mirada al cielo, una noche mas la luna se alzaba sobre nosotros velando por nuestra seguridad, siendo testigo de nuestros actos tanto buenos como malos, pero ella era fiel, ella siempre estaba ahí para escucharnos y consolarnos con su pálida luna. Sus acompañantes eran poco visibles, pues la maldad de la ciudad las escondía con todas esas luces cegadoras -también conocido como contaminación lumínica-

Metí una mano en el bolsillo mientras que con la otra sostenía el cigarro dándole de vez en cuando cortas caladas, no me giré, tan solo caminaba de manera distraída hasta llegar al borde de la azotea. Bajé la mirada y a mi mente regresó la imagen de Jers en aquella misma situación en la azotea de su casa... Retiré la mirada y no por vértigo, fue entonces cuando me giré sentándome en el borde del bajo-muro de ladrillos y demento que protegía a quien andaba por allí de caerse al vació -¿Y bien?- Pregunté cruzando las piernas a la altura de los tobillos. No tenía ni idea de por que estábamos allí, de por que se le había ocurrido aquello, pero realmente agradecía el salir del local para tomar un poco de aire en la tranquilidad de la noche...

Era la primera vez que pisaba esta azotea, que nada más terminar de subir una pequeña brisa recorrio todomi cuerpo, haciendo que mi pelo empezara a bailar de un lado para el otro. Levante mi mano para coger un mechón de pelo y ponerme tras la oreja para poder ver mejor. Arrugue la nariz en cuanto el olor del tabaco vino a mi pequeña nariz. Era un lugar tranquilo, se podía ver desde esta altura parte de la ciudad. La luna estaba en el lugar de siempre, me quede unos segundos mirandola hasta bajar la mirada y ver la espalda de Gabriel que caminaba hasta llegar al borde. Sin duda alguna pensaba que eramos como la Luna: con una cara oscura que nadie enseña. O aquel lado que no queremos enseñar ante nadie, sea bueno o malo. Por diversas razones. Pero apenas se podía ver muchas estrellas en el lugar. Escapar un día de la ciudad e irse donde no haya muchas luces que impedian ver las estrellas estaría realmente bien.

Empece a caminar al escuchar aquel "¿Y bien?" de Gabriel. Me acerque con pasos lentos pero firmes, serenos hasta llegar donde estaba él. Me sente en el bordillo dejando las piernas colgadas a esa altura, lleve mis manos atras dejandola de apoyo para inclinarme solo un poco hacia atras.
-Ahora es cuando debes gritarle a la ciudad entera. - Tras decir aquello gire mi cabeza para mirar aquel perfil de su cara. No me había reido lo había dicho con una naturalidad, como si aquello fuera lo más normal del mundo. Estaba segura que se negaría por lo que antes había dicho pero sería una linda experiencia ademas de que hacer eso en verdad te ayudaba a desahogarte.-Si, quieres, puedemos gritar los dos a la vez -Agregue segundos después pausadamente. Tal vez no era eso lo que se esperaba que haga o no tenía ni idea de lo que iba hacer o tal vez si. Aparte la mirada de él unos segundos para mirar hacia abajo y ver que aquellas calles estaban vacias. Era una noche linda, no muy fría pero no era tan temprano.-

Alcé la ceja escuchándola mientras expulsaba el humo del tabaco lentamente por la boca -¿Gritar?- Mantuve la ceja alzada aun mirándola, negando levemente -Luchamos por mantener la discreción y ¿me pides que grite?- Di otra calada al cigarro aun mirándola -Si estuviéramos en mitad del bosque...y en nuestras formas naturales no me negaría, pero con la cascara de la forma humana...- Negué con la cabeza de manera lenta comenzando a dejar escapar el humo por entre mis labios.

Alcé la mirada a la madre luna, que se fundía entre nubes propias de la época del año en la que estábamos aunque no amenazaba ni con lluvia y mucho menos con nieve. Aquello era en cierta manera relajante, la brisa nocturna agitaba la holgada camisa que llevaba puesta y desviaba el humo del cigarro. Entrecerré los ojos desechando la idea de desfogarme gritando, si lo hacía era aullando prefería "cantar" así a la madre luna que berrear y ofenderla con aquello. con los ojos casi cerrados alcé la mano del cigarro para darle une lenta y profunda calada -Antes de gritar prefiero que continúes con aquel masaje que comenzaste hace rato -Expulsé el humo por la nariz aun con la vista en la luna -Y no te preocupes por el precio- Sacudí el cigarro al suelo de la azotea.

Estaba claro que se negaría, pero no perdia nada en intentarlo. -No creo que un simple grito en nuestra forma humana, haga que los humanos sospechcen algo. -Reí por lo bajo.- Muchos humanos salen por lacalle y gritan, hasta de una manera grosera. - Tal vez estaba pasando mucho tiempo con los humanos que su constumbre me había influenciado un poco. Pero siempre guardababa las distancia entre ellos y yo. Pero mis oidos habían escuchado que si estuvieramos en el bosque el no se negaría, aunque estaríamso en nuestra forma real -No te obligare a hacerlo, puedas que tengas razón.- Mire hacia delante viendo aquellos edificios, unos más altos que otros, otros que me impedian ver más alla. Después de tantos conciertos estar así unos momentos resultaba verdaderamente agradable, relajante.-

Cuando dijo aquello le mire con los ojos entrecerrados, arrugando un poco la nariz por el humo del tabaco.- Puedes apagar un rato eso... Lo intento dejar. -Dije aquello desviando la mirada al cigarrillo que sostenía él en la mano.-

-Una de dos; Te ha gustado el masaje o tengo cara de masajista. -Al decir esto me levante de aquel borde para ponerme detras de él. Tal vez el masaje le relajaría aun más, mejor que aquel simple grito. Él tenía que dar ejemplo ante los demas lobos. Pero si quería relajarse mejor y sentir un buen masaje con aquella capa de ropa que tenía no iba a ser igual que piel con piel. -Si, no tengo que preocuparme por el precio, quisiera hacer el masaje bien para que no haya reclamaciones. - Aquello lo dije una vez más susurrandole a su oido algo despacio, mirandole desde aquella posición- ¿Tendrás mucho frío para quitarte por lo menos alguna capa de arriba? -Tras decir eso aleje mi cabeza de su oido esperando respuesta de él. Mis manos estaban puesta enciam de sus hombros, una a cada hombro.-

Negué con la cabeza cuando dijo de apagar el cigarro -Claro que puedo, pero no quiero, tómalo como una prueba de voluntad- Dije alzando luego la mano para darle una calada lenta y profunda -¿Capa de arriba?- Alcé la ceja mirándola de reojo -¿Te refieres a esta fina camisa que llevo puesta, estando en la azotea de un edificio a finales de invierno?- La miré de reojo alzando la ceja. Estaba acostumbrado al frió, es mas , me encantaba caminar por el bosque sintiendo la gélida brisa acariciar mi rostro, y si era en mi forma bestial mejor.

Llevé de nuevo el cigarro a los labios sujetándolo para usar ambas manos y comenzar a desabotonar la camisa negra que llevaba -El frío es mi aliado siempre- Dije mientras hacía aquello, para cuando acabé quité los botones de los puños llevando las manos luego al cuello de la prenda para deshacerme de de ella retirándola del todo. Me quedé con el torso totalmente al descubierto, dejando a la vista varias cicatrices tanto por mi pecho como por la espalda, entre ellas dos destacaban; una en el pecho, que la formaban tres lineas, producto de unas garras de un lobo furioso...A la espalda, cerca de la nuca, lo que parecía un mordisco imposible. Aquellas heridas me fueron hechas en mi gorma lupus, así que fácil de deducir era que la de la nuca fue para retenerme, pare inmovilizarme, la otra era de un acercamiento demasiado apresurado a quien no debía...

No me importaba que me las viera, incluso tenía una mentira preparada antaño para cuando Jacqueline lo hacía...ella fue la primera en verlas y de las pocas que siguió haciéndolo, Sujeté en una mano el cigarro y en la otra la camisa, esperando que hiciera lo propio, habiendo dejado mi espalda a su merced. Podría aparecer un acto de dejadez podría hacerme lo que fuera a la espalda para matarme, pero lo interpretaba como un acto de fidelidad de un lobo llano hacia el Alfa de la manada, como aquel cachorro que hace méritos por fundarse un hueco, aquel cachorro que ignoré...De nuevo, Jeremmy vino a mi mente, y di una calada profunda al cigarro tardando en expulsar el humo por la nariz.

Chasqueé la lengua cuando dijo aquello. Ya, una prueba de voluntad. No dije nada más acerca de aquel cigarrillo, estaba claro que no lo iba apagar. Subi los hombros y dos manos haciendo un leve movimiento de la cabeza como tambiñeb alzando las dos cejas. Diciendo que claramente era eso. Aparte mis manos de su hombros al ver que se desabrochaba la camiseta negra que llevaba puesta.

-En eso no podría estar más de acuerdo.-Murmure refiriendome a su ultimas palabras. Me aparte también de atras de él para ponerme a un lado, así tendría más espacio al quitarse la camisa. Al dejar todo el torso descucbierto pude ver en aquella posición por unos breves segundos unas cicatrices que tenía en su pecho. Aparte la mirada para cambiar de posición y deslizarme hacia atras, para estar a su espalda. Me sente detras dejando las pierna a cada lado de su cintura ya que si me pusiese de rodillas me cansaría muy rápido. Pero al ponerme y al alzar las manos para empezar el masaje pude ver otra cicatriz más. La de su nuca. Insconcientemente lleve mis dedos hacia aquella cicatriz deslizando mis dedos suavemente en ella. No pregunte como se hizo aquella cicatriz es más con aquella acción era como si lo hubiera preguntado insconcientemente. Hay un dicho que dice: "una acción vale que mil palabras" .

Era la primera vez que le veía de aquella manera. Me parecía algo raro verle de ese modo a pesar que fui yo quien se lo había pedido para hacerle mejor el masaje aunque fuera mejor que se recostara y así también le haría el masaje en su espalda pero estaría verdaderamente incomodo si se recostara en el suelo. Además de que no se lo iba a pedir. ¿Es que no había visto una cicatriz antes? Claro, pero no la de Gabriel. La del hombre que siempre intenta aparentar estar bien cuando no lo esta. Eso era una diferencia de mi. Yo si estaba de mal mal humor me encontrabas, pero por mucho que la gente preguntara si me encontraba bien, más guardaba las distancias, pero estaba pidiendo ayuda a gritos. Tal vez, era eso lo que hacia. Pero solo eran impresiones mías.